miércoles, julio 26, 2006

No Matarás

Pregunta: Si en los diez mandamientos DIOS dice, NO MATARÁS, ¿por qué los Israelitas cuando iban a la guerra mataban a sus adversarios? Está bien cuando los venían a atacar porque ellos se defendían, ¿pero qué pasa cuando ellos iban a conquistar nuevas tierras?. Ahí eran ellos los que atacaban y mataban a las demás personas.


Respuesta:
Los Diez Mandamientos no prohiben todo tipo de muerte, sino el asesinato (la traducción literal sería, "No asesinarás".) Es decir, es prohibido el matar a un ser humano inocente. Pero aún el mismo Antiguo Testamento prescribe la muerte de gente culpable: un hijo que maldice a sus padres, alguien encontrado en adulterio, recoger leña en día de resposo, etc.

Entonces, ¿por qué Dios dice que se ataque y destruya a ciertas naciones?

De la misma manera que la maldad de Sodoma y Gomorra hizo que Dios tuviera que destruirla, los israelitas se convirtieron en la espada de Dios para destruir naciones pecadoras. De hecho, Dios esperó que la maldad de algunas naciones "llenaran la copa de su ira" antes de enviar a los israelitas en contra de ellos.

"En ninguna de estas cosas os amancillaréis; pues en todas estas cosas se han corrompido las naciones que yo echo de delante de vosotros, y la tierra fue contaminada; y yo visité su maldad sobre ella, y la tierra vomitó sus moradores. Guardad, pues, vosotros mis estatutos y mis ordenanzas, y no hagáis ninguna de estas abominaciones, ni el natural ni el extranjero que mora entre vosotros." (Levítico 19:24-26)

Tiempo después Dios reprendió a la nación de Israel por hacer peores males que tales naciones: "Mas ellos no escucharon; y Manasés los indujo a que hiciesen más mal que las naciones que Jehová destruyó delante de los hijos de Israel." (2 Reyes 21:9)

También debemos tener en mente que Dios es el Creador de toda vida y tiene la capacidad de devolver la vida a quién Él decida. Por eso el hombre no puede quitar la vida de alguien por sí mismo, porque no es ni el creador de ella, ni puede devolver el aliento a la persona muerta. Siendo Dios el Dador de la vida y el que resucita al hombre, es Su derecho si decide por alguna razón quitar el aliento a alguien por cualesquiera métodos decida usar, ya sea con fuego del cielo, o por medio de un ejército enemigo.

Ciertamente todas esas naciones se levantarán en la resurrección del día final y serán justamente juzgadas por Dios; no todos ellos serán castigados con la misma severidad. Hay naciones que no fueron destruidas en el Antiguo Testamento, que tendrán un peor juicio divino en la resurrección.

"Y tú, Capernaum, que eres levantada hasta el cielo, hasta el Hades serás abatida; porque si en Sodoma se hubieran hecho los milagros que han sido hechos en ti, habría permanecido hasta el día de hoy. Por tanto os digo que en el día del juicio, será más tolerable el castigo para la tierra de Sodoma, que para ti." (Mateo 11:23-24)

Dios es siempre un Juez justo.


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