De acuerdo al nuevo libro de Michael Baigent (autor del éxito de libreria Holy Blood, Holy Grail, que se convirtió en el fundamento de El Código Da Vinci), Jesús en una carta enviada al Sanedrín confiesa no ser el Hijo de Dios, sino un hombre lleno del Espíritu de Dios y por ende sólo "hijo" adoptivo como todo otro ser humano lleno del mismo Espíritu.
El libro de Baigent se llama The Jesus Papers (Las Cartas de Jesús) y fue recientemente reportada por el erudito Hershel Shanks de la Biblical Archeology Society.
Shanks reporta que Baigent afirma haber visto tales cartas, pero no menciona el nombre del supuesto millonario dueño de ellas. Los dos únicos eruditos en lenguas bíblicas que afirmaron que era un descubrimiento "importante" ya fallecieron, lo cual resulta muy conveniente para Baigent.
Shanks duda de la autenticidad de tal historia porque tal millonario aparentemene halló las cartas escritas en Arameo en el sótano de su casa en la Vieja Ciudad de Jerusalén. Shanks afirma que la humedad de Jerusalén hubiera destruido tales cartas en pocas decenas de años. No hay manera que hubieran durado allí por 2000 años. De hecho, después de 150 años de escavaciones en Jerusalén no se han encontrado manuscritos de ningún tipo. Qué afortunado sería tal millonario de descubrir un manuscritos que siquiera pudiera tocarse sin que se desintegrara en sus manos.
Supuestamente tales cartas fueron escritas el año 34 d.C. Lo cual también es extraño ya que "hallazgos arqueológicos usualmente no pueden ser fechadas con tanta precisión," afirma Shanks.
Estas cartas supuestamente revelan "el secreto escondido más grande de la historia." La evidencia muestra que es una invención de un novelista deseoso de hacer más dinero atacando la deidad de Jesucristo.
Me pregunto qué pensará Baigent cuando se encuentre cara a cara con su Creador, y reconozca en su rostro al mismo Jesucristo.
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