El Islam tiene como objetivo supremo la conquista mundial. Esto no es negado por sus clérigos. La manera de realizar tal conquista cambia de acuerdo al país y la cantidad de poder que tengan en el mismo.
Táctica 1
Por ejemplo, en un país donde no tienen poderío militar ni político, lo hacen por medio del evangelismo, centros de información, folletos, educación religiosa y envolvimiento político. En una situación así, se convierten en campeones de la "tolerancia" religiosa. Buscan la coexistencia pacíficia con la "gente del Libro" (el cristianismo y el judaismo), mientras tratan de incrementar sus números por medio de la inmigración, y el establecimiento de familias numerosas en dicho país.
Táctica 2
Pero el momento en que su influencia política (los musulmanes buscan posiciones a todo nivel del gobierno), militar u otra son formidables en tal nación, entonces se llama a una revolución por causa del Islam, esto generalmente lleva a una guerra civil. Es entonces cuando la "gente del Libro" debe ser puesta en sujeción voluntaria al principio(pagando tributos al Estado Islam), o en conversión forzada después (dándoles la opción de convertirse al Islam o morir).
En todo el mundo el Islam está en una de estas situaciones. Países del Medio Oriente generalmente están regidos por gobiernos musulmanes totalitarios, mientras que en el Occidente están tratando de presentarse como una religión amante de la paz y convirtiendo a gente malinformada.
Ya que todo esto está basado en las enseñanzas del Qur'an (Corán), los musulmanes pueden, de acuerdo a su conveniencia, citar versículos que hablen de paz y tolerancia a otras religiones; o pueden citar versículos que llamen a todo musulmán a la realización del Jihad (guerra santa) a través de cualquier medio posible, incluyendo el terrorismo.
Mahoma mismo, utilizó la primera táctica en sus primeros años de la expansión del Islam; hasta que obtenía suficiente poder militar numérico. Entonces se daba a la conquista de pueblos por medio de la guerra sin misericordia.
El Islam nunca se dará por vencido hasta conquistar el mundo entero. La fuerza militar de las naciones no siempre será suficiente. El único poder que puede detener el avance sistemático de la "religión de mayor crecimiento en el mundo" es el poder del Espíritu Santo de Dios, y la gracia del Evangelio de Jesucristo.
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1 comentario:
En España los conocemos muy bien, ya estuvieron aquí y tardamos 800 años en echarlos.
Ahora vienen otra vez en forma de inmigración, de momento son pocos y no se les oye, pero por la historia sabemos que cuando alcancen una masa mayor comenzarán a exigir cosas que van contra nuestras leyes porque ellos no se adactan, nunca lo hacen, simplemente hacen que las sociedades a las que llegan se adacten a ellos.
Nuestros políticos están en la inopia, no deben dejarlos entrar, máxime cuando hay miles de hermanos hispanoamericanos que desearían venir a España, mientras uno sólo de éstos quiera venir que no venga un musulmán.
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