No es suficiente que el obispo episcopal Gene Robinson haya abandonado a su esposa (madre de sus dos hijas) para vivir con su amante homosexual Mark, sino que también ha osado sugerir que Jesucristo puede haber sido homosexual.
En un mensaje titulado, "La homosexualidad y el Cuerpo de Cristo: ¿Hay un nuevo camino?" dado en Christ Church en Massachusetts, un congrecista le preguntó cómo podrían los cristianos aceptar tanto la homosexualidad y el énfasis bíblico en la redención de pecados. La respuesta de Robinson:
"Interesantemente, en este día de valores familiares tradicionales, este hombre al cual seguimos era soltero, y de lo que sabemos, viajaba con un grupo de hombres, tenía un discípulo que era conocido como "aquel al que Jesús amaba"... Ese es quien Jesús es, eso es lo que él era, en su vida terrenal."
David Virtue, un anglicano, en su página de internet VirtueOnline, respondió:
"Es totalmente inaceptable insinuar que la relación de Jesús con Juan era homo-erótica, pero torcer la verdad en la única manera en que esta gente puede obtener justificación bíblica para su estilo de vida."
El torcer escrituras (como la conocida historia de David y Jonatán) para hacer parecer que algunos hombre de Dios eran homosexuales es un conocida táctica homosexual. Pero cualquiera que ha leído tales pasajes bíblicos sabe que tal uso de la Biblia no es justificado por el sagrado texto.
Al mismo tiempo, estos mismos homosexuales tratan de refutar la multitud de claras referencias bíblicas que condenan todo tipo de pecado sexual, especialmente la abominación homosexual, diciendo que "no dicen lo que parecen decir."
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